Es difícil imaginar que dentro de un edificio corporativo normal y corriente, con mucho cristal y acero, se fabrica la máquina que puede que sea actualmente la más preciada en el mundo.
Por algo la tecnología detrás de ella está en el centro de una feroz carrera en la que compiten Estados Unidos y China para tratar de ser la superpotencia dominante del futuro.
La fábrica se encuentra en el sur de Países Bajos y pertenece a ASML, una compañía que se ha convertido en la tecnológica más valiosa en Europa.
¿Qué es lo que produce? Diseña y fabrica las máquinas que producen los microchips informáticos, pero no unos microchips cualquiera.
Son máquinas que fabrican los microchips más avanzados del mundo y ASML es la única empresa en el planeta que cuenta con ese tipo de tecnología.
Este monopolio efectivo significa que el funcionamiento exacto de las máquinas de ASML está sujeto a algunas de las medidas de seguridad empresarial más estrictas del mundo.
Lo que no evitó que nos permitieran visitar su planta y nos explicaran los conceptos básicos de lo que hacen y cómo lo hacen.