Una mujer muere cada dos minutos en el mundo durante el parto o por complicaciones vinculadas al embarazo, aunque la mortalidad materna se redujo en un tercio en las últimas dos décadas, informó ayer Naciones Unidas.
El embarazo sigue siendo “una experiencia extremadamente peligrosa para millones de personas en el mundo que no tienen acceso a servicios de salud respetuosos y de buena calidad”, lamentó el director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, en un comunicado.
La agencia de la ONU, que redactó el informe, reveló que 287 mil mujeres murieron durante el embarazo o el parto en 2020, es decir, una cada dos minutos. En 2000, fueron 446 mil, según la misma fuente.