Las sustancias tóxicas, la predisposición genética y la alimentación pueden detonar la enfermedad, señalaron especialistas en cáncer y hematología.
La exposición a sustancias tóxicas, la dieta y la predisposición genética hacen que los mexicanos desarrollen leucemia a una edad más temprana que en otros países, dijeron expertos.
Así lo dio a conocer en el Congreso de Enfermedades Hematológicas en Guadalajara, Jalisco, donde el doctor Alfredo Cabrera García, encargado de la Clínica de Leucemia Aguda del Hospital Regional de Alta Especialidad de Ixtapaluca en Edomex, elaboró una lista de sustancias nocivas.
Confirmó que los diluyentes (solventes), pinturas, barnices, pesticidas, fertilizantes y todos los productos que contienen benceno son los más tóxicos para la sangre humana. Algunos de ellos pueden transferirse a los alimentos y afectar a alguien; y cuando se combina con una predisposición genética, puede desencadenar la enfermedad.
Si su trabajo involucra sustancias tóxicas, lo más probable es que este tipo de enfermedad ocurra porque las sustancias tóxicas se acumulan en la médula ósea y alteran su función normal en un intento de protegerse.
Gilberto Baranco, coordinador médico de la Clínica de Leucemia Crónica del Hospital General de México, dijo que la leucemia mielógena aguda se presenta en personas mayores de 60 años en el mundo, pero en nuestro país se presenta con mayor frecuencia en personas de 40 y 50 años, probablemente debido a factores ambientales. La leucemia linfoblástica ocurre con mayor frecuencia en niños, pero en México la incidencia es alta en adultos de 60 y 70 años. Dijo que la disponibilidad de medicamentos avanzados significaba que las personas con leucemia crónica «pueden vivir casi la misma vida que las personas que no tienen cáncer».
Aunque no se logró este objetivo en los pacientes con leucemia aguda, que son los más agresivos, se logró una mejor supervivencia en comparación con la quimioterapia, dijo también el médico del Instituto Mexicano del Cáncer.
Cabrera García dijo que estos tratamientos están disponibles en los hospitales públicos y logró que la quimioterapia se use solo en algunos casos; que dejan atrás casi 60 años de este tratamiento químico con fármacos que se dirigen sólo al tumor para no afectar a otros órganos, cada vez con efectos menos tóxicos.
Ahora podemos tratar a un paciente de más de 80 años, lo que era difícil de creer, con muy buena respuesta, a veces incluso sin hospital.