La leche materna ayuda a diagnosticar el cáncer de mama en una etapa temprana

Estudio revela que de 15 casos de mujeres con cáncer de mama diagnosticado durante el embarazo o postparto, en 13 de ellas se detectó en leche materna la misma mutación que en el tumor que padecían.

Un equipo de investigadores del Instituto de Oncología Vall d’Hebron (VHIO) de Barcelona, ​​España, confirmó que la leche materna contiene ADN de tumores de mama, abriendo la puerta al diagnóstico de cáncer a través de una biopsia líquida. Niveles.

El estudio, publicado en la revista Cancer Discovery, se basa en las preocupaciones de una paciente con cáncer de mama que temía transmitir la enfermedad a su bebé mientras amamantaba, ya que le diagnosticaron poco después de que su segunda hija dejara de amamantar. su tercero

La investigadora del VHIO Cristina Saura, jefa del servicio de mama del Hospital Vall d’Hebron, explicó que esta paciente trajo una muestra de leche materna que guardaba en el congelador.

Aunque le dijimos que no había riesgo de que el tumor se extendiera, decidimos analizar la muestra para buscar marcadores que pudieran ayudarnos en el estudio.

Los investigadores descubrieron que esta bolsa, recolectada unos 18 meses antes del diagnóstico, ya contenía ADN tumoral, conocido como ADN tumoral circulante (ctDNA).

Como guía, los investigadores recolectaron muestras de sangre y leche materna de varias pacientes con cáncer de mama diagnosticadas durante el embarazo o el parto, así como de mujeres sanas que amamantaban.

De los 15 casos de cáncer de mama ya diagnosticados durante el embarazo o después del parto, 13 presentaban en la leche la misma mutación que en el tumor que padecían; en cambio, sólo un análisis de sangre fue positivo.

En los tumores localizados la liberación de ADN a la sangre es baja y muy diluida, pero en la leche materna vemos una cantidad más fácilmente detectable, lo que la convierte en una potencial herramienta de diagnóstico.

El siguiente paso es comenzar un estudio más amplio que recopile muestras de leche materna de 5.000 mujeres sanas que quedaron embarazadas a los 40 años o más, o de mujeres de cualquier edad que tengan mutaciones que aumenten el riesgo de cáncer de mama (BRCA1, BRCA2, PALB2, RAD51C/D).

El objetivo es comprobar si el cáncer de mama se puede detectar en una fase más temprana en la leche materna, incluso antes de utilizar técnicas de imagen o análisis de sangre.

Detección como pinchazo en el talón
Si los resultados son los esperados, Saura propuso que todas las mujeres podrían hacerse la prueba con la leche materna tras dar a luz, tal como se hace con los recién nacidos en el llamado test de portador.

Pensamos que sería útil porque el cribado poblacional del cáncer de mama se realiza mediante mamografía a partir de los 50 años, y esta nueva prueba se aplicaría a una población más joven donde no realizamos pruebas; y cuanto antes diagnostiquemos el cáncer, mayores serán las posibilidades de curarlo.