Los niños maya-mexicanos más altos y con sobrepeso

La dieta globalizada de los habitantes del sur de México cambio debido a su mejor calidad de vida y la transición al trabajo turístico.

Un estudio de la Universidad Modelo de Mérida, la capital de Yucatán, encontró que las niñas y los niños mayas de las comunidades rurales, que viven en condiciones más precarias, ganaron cuatro décadas en estatura y peso debido a la globalización. dieta

Hugo Azcorra Pérez, nutricionista del centro de investigación, explicó el proyecto sobre crecimiento, nutrición, ontogénesis y metabolismo de las comunidades rurales de Yucatán y confirmó que el alimento es alto en energía pero bajo en vitaminas y minerales.

En las últimas cuatro décadas los niños son altos, la desnutrición crónica ha desaparecido, pero tienen sobrepeso por factores económicos y socioculturales.

El estudio muestra que los niños del sur de México han aumentado su estatura porque las condiciones de vida de sus familias son mejores por el cambio del trabajo de la milpa al turismo.

Ahora vemos que sus casas tienen mejor infraestructura, tienen agua potable y electricidad, lo que significa que tienen acceso a líquidos esenciales seguros y más baños.

Pero “las familias se han empobrecido en su alimentación, porque dependen principalmente de lo que se vende en las chacras, no de lo que se cosecha del campo”.

La Milpa
Pérez dijo que si bien la milpa es una fuente importante de alimentos, ya no es el principal abastecimiento de las familias rurales. La visión romántica de la dieta de la milpa enfrenta enormes desafíos porque los jóvenes de las familias ya no están interesados ​​en sembrar la tierra y otros sienten que la tierra ya no da para más.

El investigador citó ejemplos de comunidades que hoy prefieren vivir del turismo, como Chichén Itzá, Ek Balam y lugares cercanos con cenotes y sitios arqueológicos.

Azcorra Pérez consideró que las comunidades mayas deben volver a lo básico: comidas caseras y consumo diario de frutas y verduras, y dijo que «afortunadamente» la mayoría de las madres jóvenes en Yucatán siguen la tradición de amamantar a sus hijos.