35% de las pinturas para hogar en Ciudad de México contienen niveles peligrosos de plomo. Un riesgo grave para la salud, especialmente de los niños.

El plomo en las pinturas domésticas representa un grave riesgo para la salud, especialmente para los niños, según un estudio reciente del Lead Exposure Elimination Project (LEEP). Este análisis encontró que el 35% de las marcas de pintura comercializadas en Ciudad de México contienen al menos un producto con niveles peligrosamente altos de plomo, superando en algunos casos las 10,000 partes por millón (ppm), más de 100 veces el límite recomendado por la Organización Mundial de la Salud (90 ppm).
Los colores amarillo y rojo son los más afectados debido al uso de pigmentos a base de cromato de plomo. En contraste, las pinturas a base de agua no presentaron niveles elevados de este metal, lo que refleja una tendencia positiva.
La exposición al plomo puede causar daños irreversibles en el desarrollo cerebral de los niños, reduciendo su coeficiente intelectual y afectando su comportamiento. En adultos, puede provocar hipertensión y enfermedades cardiovasculares. Además, la exposición al plomo en México en 2019 representó un costo del 2.76% del PIB, superando el presupuesto de la Secretaría de Salud.
Aunque existen regulaciones en México, estas son obsoletas y no se cumplen adecuadamente. El límite actual de 600 ppm es significativamente más alto que en países como Estados Unidos y Canadá. Sin embargo, ya hay alternativas seguras y libres de plomo disponibles en el mercado.